Una vez más, la ITV cambiará ligeramente para todos aquellos que acudan a una estación a partir de mayo. Te contamos todos los detalles.
Tras los importantes cambios aplicados en mayo de 2018, la ITV sigue recibiendo pequeñas modificaciones para mejorar la vigilancia de los vehículos que no cumplen con los requisitos mínimos de mantenimiento o para agilizar algunos trámites que se viven en las estaciones para la revisión técnica de los vehículos.
Como decíamos, en 2018 se vivieron los cambios más profundos en los últimos años. Se estableció la posibilidad de elegir estación para una segunda revisión si la primera había resultado desfavorable y se facilitaron los trámites para los coches importados desde el extranjero. Pero, sobre todo, se incluyó en el proceso a la máquina OBD para los modelos más nuevos y se endurecieron las pruebas de emisiones.
Ahora, los cambios serán más leves e irán orientados a facilitar el trámite tanto a los conductores como a los inspectores de cada estación. Para ello, todos los fabricantes están obligados a entregar toda la información técnica relativa de cada modelo matriculado o puesto en servicio a partir de mayo de 2018.
Para facilitar la documentación, los fabricantes tienen hasta el 20 de mayo de 2020 para entregar a los conductores y a los técnicos todos los datos relativos a sus vehículos y, además, están obligados a incorporar todas las modificaciones que se incluyan en las actualizaciones del modelo. De esta manera, se comprobará con facilidad si el vehículo ha sufrido modificaciones no homologadas.
Fuente: www.autopista.es
05/02/2020