Las matriculaciones de turismos y todoterrenos en Málaga han cerrado la primera mitad del año 2019 con un descenso del 5,24% en relación al mismo periodo del ejercicio anterior con un volumen de 17.810 unidades, según los datos publicados ayer por las asociaciones de fabricantes (Anfac), concesionarios (Faconauto) y vendedores (Ganvam). Las ventas, tras el nuevo descenso contabilizado en el mes de junio, encadenan ya diez meses de caídas interanuales en la provincia desde que entrara en vigor, en septiembre del año pasado, el nuevo ciclo de homologación de consumos y emisiones WLTP.
La bajada de las matriculaciones está protagonizada al completo por el canal de particulares (el principal sostén del mercado), que baja en Málaga un 17,66% con 9.727 operaciones.
Por el contrario, tanto las compras por parte de empresas como las del canal de Rent a Car (flotas de vehículos para alquiler) presentan subidas: en el primer caso de un 17,7% con 4.442 unidades y en el segundo de un 13,7% para un total de 3.641 operaciones. Pero el aumento de las compras por parte de empresas y rent a car no logra compensar la reducción de compras de los particulares.
En cuanto al tipo de motorización, la matriculación de vehículos diésel cae en Málaga un 30,6% en lo que va de año mientras que los de gasolina suben 20,9% y el resto (híbrido enchufable, híbrido, de hidrógeno o de gas) un 22%.
En las ventas de este 2019, el mercado se reparte entre una cuota del 63,2% para gasolina, el 28,4% para diésel y el 8,3% restante para las mencionadas opciones alternativas. El sector de los concesionarios asume ya que el año traerá un retroceso en las ventas de vehículos y todoterrenos tras varios ejercicios de continuo crecimiento debido a la incertidumbre del consumidor sobre el futuro de los motores de combustión. La patronal de concesionarios Faconauto anunció hace una semanas su previsión de que el presente ejercicio se cierre con un descenso de operaciones a nivel andaluz del 7,8%, tendencia que continuará en 2020con otra bajada prevista del 4.5%.
En Málaga, y al ritmo presente, las ventas cerrarían el presente año con unas 33.200 ventas, por debajo de las casi 35.000 que se contabilizaron en 2018.
En España, las matriculaciones cerraron el primer semestre del año con un volumen de 692.472 unidades, lo que supone una disminución del 5,7% si se compara con dicho período del año anterior. El vicepresidente ejecutivo de Anfac, Mario Armero, afirmó que esta situación representa una «crisis» en el sector de la automoción, «cuando no hay ningún indicador económico que sustente este descenso más allá de la incertidumbre de los consumidores».
Por su parte, la vicepresidenta ejecutiva de Faconauto, Marta Blázquez, y la directora general de Ganvam, Ana Sánchez, apuntaron que los datos evidencian que el sector de automoción está atravesando una situación «delicada», como consecuencia de la inestabilidad política y de la incertidumbre que afecta al cliente.
La ministra de Hacienda en funciones, María Jesús Montero, opinó que el sector del automóvil no tiene, en este momento, «farolillo rojo» pese al nuevo descenso registrado en junio en las matriculaciones de vehículos, aunque ha reconocido que habrá que seguir los indicadores en este ámbito. «Un mes no es significativo», afirmó Montero, que añadió que a la hora de analizar las ventas del sector se debe de contar con una serie o periodo de tiempo «suficiente». Además, recalcó que el año pasado el sector tuvo un «comportamiento adecuado». «Por tanto, no es un elemento que tenga farolillo rojo en este momento», reiteró.
Fuente: La Opinión de Málaga